lunes, 14 de julio de 2014

Errores cognitivos más frecuentes


autoaceptación


En muchas ocasiones, no somos conscientes de nuestra forma de pensar. Igual que hay personas que respiran mal, caminan mal, se sientan mal o hablan mal, sin tener conciencia de ello, también somos muchos los que pensamos mal, sin darnos cuenta directa de ello.

Cuando esto sucede aparecen ciertos síntomas que son indicativo de que algo no funciona bien, algo no estamos haciendo de forma correcta.no estamos "pensando bien", no estamos trabajando bien a nivel cognitivo.

El las sesiones de terapia, este es uno de los temas que trabajamos, detectar esos errores cognitivos que hacen que tengamos una unas creencias sobre lo que sucede que no coincide con la realidad. Trabajamos la detección de señales o indicios de que estamos procesando mal la información a nivel cognitivo.


 La Inferencia arbitraria, que consiste en extrae una conclusión cuando se carece de datos o cuando éstos son realmente contrarios a la conclusión. 
  • Ejemplos: Una persona ve fruncir el entrecejo a un miembro del público y piensa: “debo estar diciendo estupideces”. Una persona que cree que ha tenido un hijo deficiente es un castigo por su mal comportamiento.
Se han distinguido dos tipos frecuentemente:

              1. Lectura de la mente: se da por supuesto lo que el otro está pensando o lo que significa su                   comportamiento (mi pareja habla poco hoy, esta enfadada conmigo).

              2. Error del adivino: estar convencido de que las cosas que se anticipan son ciertas aunque                     no hay base para ello.

La Sobregeneralización consistente  en extraer una regla general injustificada a partir de un único incidente o hecho aislado.
  • Por ejemplo, una persona que le ha ido mal una vez hablar en público y piensa “nunca lo conseguiré”. Otra sobregeneralizaciones: “todos los hombres/mujeres/adolescentes son iguales”, “siempre puedes confiar en un amigo”. Una forma extrema de sobregeneralización es la etiquetación: adscribir etiquetas generales a uno mismo o a los demás en vez de pensar en términos de conductas concretas (p.ej., una persona castigas injustamente a su hijo y piensa que es un fracaso como padre en vez de pensar que ha cometido un error)
Exageración. Consiste en exagerar el significado o importancia de un acontecimiento o conducta. Es lo que se ha llamado “catastrofismo” cuando una persona espera los peores resultados posibles en una situación sin que hayan suficientes razones para ello.
  • Ejemplos: Persona que nota el corazón un poco acelerado y lo interpreta como indicio de un miedo espantoso; profesor que piensa que si se bloquea el primer día de clase su carrera profesional se habrá acabado.
Minimización. Consiste en subestimar la importancia de acontecimientos o conductas.
  • p. ej. persona que minimiza los logros o capacidades propias y/o las imperfecciones de los otros; persona que no valora los pequeños cambios que va haciendo su cónyuge.
 Dentro de este rasgo entra lo que se han llamado descalificación de lo positivo, que consiste en quitar importancia los aspectos positivos de las personas o las cosas o transformarlo en algo negativo (persona que piensa que cuando le alaban por un hecho solo lo hacen por cumplir; persona que atribuye algo que es mérito propia a la suerte; persona que piensa que si le invitan a la fiesta es porque quieren pedirle algo).

Abstracción selectiva o filtro mental. Consiste en no tener en cuenta uno o más aspectos importantes de una situación, de esta forma, la persona enfoca ciertos detalles de una situación multifacética, mientras hacen caso omiso de otros detalles relevantes, ya sea por no atenderlos, no integrarlos o no utilizarlos.

  • Por ejemplo, persona que interpreta su actuación  al hablar en público como fatal porque solo se fija en los errores y pasa por alto progresos reales, paciente deprimido que solo se fija en sus experiencias negativas mientras ignora las positivas.
Todos estos “errores cognitivos”, son errores porque, si te fijas, son exageraciones, consiste en coger el “camino fácil” aunque no sea el más adecuado. Consiste en evitar el esfuerzo de pensar y revisar la certeza o no de nuestro pensamiento. Es más “cómodo” seguir pensando así de mal, aunque me dé un montón de problemas que reconocer que lo estoy haciendo mal. Prefiero echar la culpa al otro, o al mundo que intentar cambiar nuestra forma de pensar para adaptarnos mejor a nuestra realidad para ser más felices.

Tenemos tendencia a posicionarnos en el papel de víctima y ya va bien, porque la mayoría de personas, piensan que consolando a la persona la están ayudando y, en parte, es un error. Consolar a la persona que sufre es humano, ayuda al que sufre a sentirse querido, pero cuando ese sufrimiento es exagerado e injustificado, está basado en errores cognitivos.


Una separación, la pérdida de un trabajo, un discusión con mi pareja/hijo-a/ jefe, son situaciones
incómodas, desagradables o frustrantes, pero en absoluto catastróficas o terribles. Por que si valoramos estas situaciones como catastróficas o terribles, ¿cómo valoraríamos situaciones reales y objetivamente más terribles, como una enfermedad terminal, una violación, un intento de asesinato, un secuestro, un abuso a menores o la pérdida de nuestra libertad de forma injusta?

En conclusión, exageramos. Exageramos la importancia de lo que nos pasa, y para contrarrestar esta forma de pensar hemos de utilizar argumentos que nos ayuden a relativizar la importancia de lo que nos pasa.

Tenemos baja tolerancia a la frustración, queremos las cosas ya, aquí y ahora. Exigimos que la cosas sean como nosotros queremos que sean y si no es así, estallamos!!!!

Abrirse a la realidad de mundo sería un buen ejemplo para conseguir argumentos que nos permitiese valorar en su justa medida aquello que nos sucede en la vida.

Es cierto, no es agradable tener que enfrentarse a una separación, sin embargo, existen miles de cosas en la vida de las que puedo disfrutar!!! Además, ¿qué es una separación comparado con que en otras sociedades del mundo, las mujeres no tienen ni voz ni voto, donde un hombre puede matar a su mujer si sospecha que le engaña y barbaridades de ese tipo? Es evidente, que desde este nuevo punto de vista, un separación es una minucia, ¿no crees?

Haz lo que amas, ama lo que hagas

Toni Aznar

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