- Necesito a alguien a mi lado que me quiera mucho para estar bien.
- Si no tienes pareja eres un desgraciado.
- Tu pareja te tiene que hacer megafeliz y eso no ocurre.
Pero lo que ocurre es que si tienes esta creencia en el caso de que tengas una pareja también vas a ser un desgraciado.
Ante estas creencias, de necesidad imperiosa de tener una pareja que nos haga inmensamente feliz siempre, se está convirtiendo en:
- una relación de dependencia hacia la otra persona.
- Una relación basada en la exigencia (para estar juntos, exijo que él/ella..., sino, yo no podría estar con él/ella),
- basada en la propiedad (es mío/mía y no pienso compartirlo/a con nadie, es "mi tesoro")
- y finalmente en el miedo. Miedo a perderlo/a, ya que cómo lo necesito imperiosamente para ser feliz, la sola idea de que desaparezca de mi vida, me da pavor.
La fortaleza está en la renuncia
Las parejas que acuden a terapia son un saco de reproches y quejas. Las parejas que logran estar juntas mucho tiempo es porque no se queja el uno del otro. Es muy interesante aprender a no quejarse, de corazón."...dispones de tu pareja en un 25% y no en un 100%, de acuerdo, pero lo primero que tenemos que hacer es aprender a apreciar ese 25%, porque si no sabemos apreciarlo, podemos lograr el 75% y tampoco lo apreciemos. Eso nos pasa porque nos falta lo fundamental:
Saber apreciar las cosas buenas de la vida."
Antonio Boliches
Si eres feliz sin pareja más probabilidades tienes de ser feliz con pareja y de hacer feliz a la pareja. Ya que no vivir en pareja no significa no tener amor, ya que el amor y la felicidad ha de depender menos de los demás y más de nosotros mismos.
Haz lo que amas, ama lo que hagas
Toni Aznar
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